[Publicado en Granada Hoy, 21/8/2008]
Nuevos miradores permiten contemplar parajes desconocidos de Los Infiernos
Nuevos miradores permiten contemplar parajes desconocidos de Los Infiernos
La Confederación instala miradores, bancos, barandas de seguridad y nuevos accesos para disfrutar mejor del paraje que describe Irving en los Cuentos de la Alhambra
Lidia Muñoz Ucher. Loja.
La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y la Junta de Andalucía, a través de la empresa pública Egmasa, ha concluido la segunda fase de la adecuación medioambiental del paraje de Los Infiernos, declarado Monumento Natural por la Junta de Andalucía. La limpieza de las zonas más degradadas de este entorno y la instalación de bancos, miradores, barandas y accesos ha transformado este enclave en un espacio de recreo para todos los lojeños y visitantes. Esta primera fase ha adecentado el entorno hasta la Fuente del Paraíso y continuará con la señalización de zonas como Los Molinillos, La Esperanza o El Batán dentro del monumento natural.
Enmarcado en el proyecto "Lago de Andalucía", que prevé la mejora de los cinco municipios de la ribera del embalse de Iznájar -Loja entre ellos-, la Junta de Andalucía plantea la continuación de la ruta desde la Fuente del Paraíso hasta la Cola del Caballo, una cascada en la que el agua salta a más de ocho metros de altura. "La ruta desde el Camino de los Molinillos hasta la caída de la Cola del Caballo será una de los senderos más espectaculares de nuestro entorno y a la vez más fáciles de acceder", según detalló ayer el concejal de Medio Ambiente, Pedro Lanzas. De hecho, el acceso hasta la Cola del Caballo es complicado y requiere cierta capacidad física. Con esta actuación, se pretende que cualquier visitante pueda completar esta ruta sin grandes dificultades ni preparación especial. También los accesos a Los Infiernos se han arreglado con el fin de facilitar la entrada de visitantes desde la zona de Los Molinillos, ubicada casi a pie de centro urbano en Loja.
Monumento natural
La riqueza medioambiental de Los Infiernos de Loja ha llevado a la Confederación, en colaboración con la Junta y el Ayuntamiento de Loja, a rehabilitar este paraje con el fin de garantizar su conservación, "sobre todo ante las crecidas del río Genil y la suciedad que arrastra desde puntos altos de la cabecera del Genil", tal y como aseguró el alcalde de Loja, Miguel Castellano, durante su visita al monumento. De esta manera, la restauración de esta zona permite tanto el paseo como el descanso de los visitantes que, sentados en los bancos instalados en la zona, pueden contemplar la belleza de este paraje.
La Junta de Andalucía también instalará barandas en la Cola del Caballo, para que el visitante pueda visionar mejor su enorme cascada. "Es una de las grandes reivindicaciones que desde el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Loja estamos cumpliendo y que se completará con la señalización, conservación y promoción turística de la riqueza botánica de este monumento natural.
"Hay pocos lugares en Andalucía como Los Infiernos de Loja y en este paraje está parte de nuestra historia". Con estas palabras el alcalde de Loja ser refirio el mito que hizo de esta zona Washington Irving en Los Cuentos de la Alhambra, "novela en la que hablaba de las cuevas de Los Infiernos como el lugar donde escondían los tesoros los reyes nazaríes por el ruido que hacía el agua dentro de ellas, que recordaban al "averno", según recordó Castellano.
La difusión que el escritor americano hizo de los "Infiernos de Loja" en sus Cuentos ha contribuido a que sea un paraje muy conocido. "Esta difusión es todo un compromiso para Loja, por lo que desde las instituciones públicas queremos contribuir a la conservación de este patrimonio natural", añadió.
Como novedad, en la zona de El Batán se han instalado barandas integradas en el entorno como sistema de seguridad ante los enormes tajos que se abren en este punto del monumento. Las barandas permiten además contemplar más cómodamente el paisaje sin correr riesgos. La señalización prevista permitirá consultar el nombre y las características del entorno que se observa en cada punto, no sólo del propio paraje de Los Infiernos sino de todo lo que lo rodea, como la Sierra de Loja, el Monte Hacho, el valle del Genil o el cierre de la Vega de Granada. El regidor lojeño lo calificó como "un punto excepcional para contemplar y conocer nuestro medio geográfico y medioambiental, donde -no por casualidad- se encuentra uno de los yacimientos arqueológicos más importantes de Loja".