La senadora y exministra de Asuntos Sociales Matilde Fernández, felicitó hoy al Partido Popular por nombrar como secretaria general a Dolores de Cospedal, "una buena servidora pública y una persona muy razonable". Fernández mostró su deseo de que las mujeres del PP "rellenen de contenidos y de objetivos feministas la ponencia del Congreso" y que llegue "la etapa del diálogo y del pacto del PP con el Gobierno, que es lo que dará seguridad y estabilidad a la sociedad española", aseguró.
En el marco de la Escuela de Bienestar de la Diputación de Granada, que se celebra en Almuñécar (Granada), Fernández sostuvo que "fuimos las mujeres socialistas las que, con mucha incomprensión en los años 80, trajimos al debate de la sociedad española el sistema de cuotas".
Según Fernández, esto supuso "abrir las puertas a las mujeres en todos los partidos, incluso en los que no lo reconocían como el PP, que aún así ha tenido que aplicarla a veces con sangre". La senadora socialista lamentó la "incoherencia" del PP por "hacer sus listas conforme al sistema que aplicaba el resto de partidos e incluso nombrar a mujeres para la presidencia del Congreso y en el Senado, y recurrir la Ley de Igualdad hasta que el Tribunal Constitucional le quitó la razón".
El Partido Popular, según la exministra, "no quiere aceptar lo que en todo el mundo se hace para corregir las desigualdades en sociedades patriarcales y machistas".
Matilde Fernández aseguró que "las mujeres españolas deben mucho a las mujeres feministas progresistas y particularmente a las mujeres socialistas, que sufrimos mucho hasta poner en marcha políticas de igualdad".
En su conferencia sobre el ejercicio de la ciudadanía en las personas con dependencia, Matilde Fernández destacó la iniciativa de que la comunidad de Andalucía "haya depositado competencias en las Diputaciones Provinciales y los Ayuntamientos para implantar la ley de Dependencia", por lo que opinó que Andalucía "lo está haciendo mejor que el resto regiones de España".
Sobre el desarrollo de la ley, Fernández afirmó que "llevará tiempo universalizar la atención a las personas que no pueden ser autónomas, pero como ha llevado tiempo universalizar la educación, la sanidad o el sistema de pensiones". Concluyó que lo importante es "que se haga con un alto nivel de pacto entre los protagonistas para desarrollar la ley, y no importa que se haga en ocho, diez o quince años, sino que se asuma el reto de garantizar la calidad de vida y las prestaciones sociales para personas dependientes, que a su vez genere empleo de calidad"
