28/1/08

Poderosos en crisis, ciudadanos al poder

Estamos en crisis. Esto significa que nada de casa nueva, de 40 millones. Ni de coche nuevo, de 20.000 euros. Ni nada de hipotecas caras, de 800 euros al mes. Ni de viajes a París. Ni de trajes nuevos. Ni nada de cenas y copas los sábados por la noche.

Pero sí de consumir de manera responsable. Y no dar nunca más 40 millones por una casa nueva de 80 metros. Porque hay cientos de casas vacías en los cascos antiguos de nuestras ciudades o caserones en nuestros pueblos por mucho menos y llenos de vida. Una vida más acorde con nuestra condición de ciudadanos con pleno derecho a disfrutar de nuestros ingresos, que no a sufrir para pagar la hipoteca a fin de mes. Porque eso es lo que quieren los bancos. Que nos hipotequemos. Para pagar sus lujos: su casa -no la de 80 metros-, su coche -no el Ford Fiesta-, sus viajes a París.

¿Que toca reducir gastos innecesarios?¿Comer en casa, comprar en el mercado, acabar con las compras compulsivas, gastar menos luz, gas en casa, menos móvil, menos gasolina, alargar la vida de nuestros bienes, cuidar mejor los que tenemos, viajar en tren, dejar el coche nuevo para más adelante? Pues adelante. En realidad, es lo que intentamos hacer siempre. Y además nuestro entorno lo agradecerá: menos humos, menos gasto energético, menos residuos -que nuestro dinero nos cuesta reciclar-.

Así que crisis... ¿qué crisis?¿La del promotor inmobiliario que quiere seguir ganando millones?¿O la del promotor inmobiliario y/o banca que acusa al Gobierno de meternos en una crisis para que el ciudadano vote al PP, el PP les ayude a seguir especulando, los especuladores nos convezcan de que no hay crisis y así los ciudadanos sigamos hipotecándonos y consumiendo a destajo?

Vamos a poner un poco de cordura a todo esto. Vamos a responder a esa supuesta crisis con un consumo responsable, que nos permita trabajar y vivir, no pagar la vida de lujo de los demás.

Desde luego, como dice Antonio Manfredi en un elogiable artículo con el que estamos plenamente de acuerdo, vamos a seguir la campaña electoral muy, muy de cerca.

Actualización: Quién dice París, dice cualquier otro lugar que esté a más de 3.000 euros de gastos, por ejemplo. Que ahora todo el mundo se ha ido a París en vuelo barato, vaya. Si es que París bien vale...